Uno de mis trabajos más queridos es dar terapia, me gusta ayudar a las personas en su propio encuentro y apoyarlos en que observen su situación desde una conciencia universal. Una de las situaciones a las que me enfrento a menudo, es cuando el objetivo de mis pacientes es llegar a ser feliz.
Cuando yo les pregunto: ¿Qué es ser feliz para ti? Un enorme silencio inunda el espacio, ahí esta el primer acto de conciencia de un desconocimiento propio; los seres humanos no sabemos qué es ser felices, porque la felicidad se vuelve una meta desconocida, sólo nos dedicamos a ir por ella sin saber qué camino elegir.
Para mí, la felicidad es un concepto libre de juicio y cada quién tiene el derecho de determinar qué los hace felices y qué no, pero vivimos en un mundo influenciado por el entorno y los medios quienes nos hacen creer que el tener, el parecer o el ser alguien es lo correcto, y no, son conceptos fabricados de algo que se vuelve falso.
¿Recuerdas cuando platicamos del apego? Te comenté que somos apegados porque lo de afuera nos define; entonces si nos define el exterior y no lo tengo, se convierte en una frustración inconsciente porque parece que nuestra felicidad nunca aparecerá.
Déjame decirte que hemos estado equivocados, porque la felicidad es un estado, un estado que proviene de nuestro interior y entre más olvidado esté, la felicidad menos se siente.
No hay situación, circunstancia o relación
que pueda hacerte feliz o infeliz;
la felicidad es una elección y es ahora.
Deepak Chopra
Como siempre he dicho, comencemos a ser lo suficientemente responsables de hacernos cargo no sólo de nosotros mismos sino de todo aquello que vive en unidad a nosotros; recuerda que ninguna situación o persona nos hará felices, así que de ahora en adelante evitemos pensar que “hasta que tengamos” o “hasta que encontremos a la persona que nos hará felices” porque por ley de resonancia encontraremos a alguien que nos recuerde lo infelices que hemos sido y lo incompletos que nos sentimos.
Vivimos en un mundo de mucho sufrimiento y carencia y de alguna manera eso nos conecta con la desgracia y de forma inconsciente nos genera un concepto erróneo de la felicidad porque la percibamos como una ilusión que sólo los afortunados tienen y todos esos afortunados son los que cuentan con grandes cantidades de dinero porque creemos que nada les falta. Dejemos de vivir en esa fantasía, porque la felicidad no se compra, se crea como un derecho.
Cada quien tiene un estándar de felicidad distinto pero todos en este mundo creemos que tenemos el derecho de opinar sobre los conceptos ajenos y nos sentimos con el poder de juzgar a los demás creyendo que lo que nosotros pensamos y decimos es lo correcto, es mentira, cada quien vive lo que cree de acuerdo a la percepción que es más conveniente y donde radica su propia verdad.
Recuerda que todos tenemos el libre albedrío de decidir y tener la voluntad de ser felices o no, al fin y a la cabo todos estamos viviendo una misma experiencia desde diferentes perspectivas u horizontes y estamos aprendiendo a identificar qué nos hace felices y qué no; lo preocupante es cuando decidimos aferrarnos a aquello que nos impide la felicidad porque a veces parece que es más sencillo enamorarnos de aquello que nos hace daño y eso se vuelve un confort silencioso que con el tiempo nos apaga.
Sólo puedo decirte que es tiempo de que te atrevas a preguntarte ¿qué me hace feliz? ¿qué quiero yo? Y sin temer a la respuesta entenderás que el objetivo es caminar con la vida sin correr detrás de ella, y puedo asegurarte que cada paso que des, sentirás tal dicha que comprenderás que la felicidad no necesitaba ser buscada, sólo requería que la reconocieras como un estado natural en ti.
Hoy elijo ser feliz,
Shary ChavLó ∞
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