Siempre he creído en la existencia de la divinidad, he pasado por esas etapas en donde he sido creyente de un hombre en el cielo, de un Universo, de una divinidad; incluso, he sido creyente de la nada y desafortunadamente mi sentido religioso; el cual, corre por mi ADN  y por el ADN de mis ancestros, me ha hecho creer que no soy ni seré libre; han existido muchos momentos en donde me siento separada, en donde pienso, creo y siento que Dios no existe y que el exterior es el culpable de mi estados emocionales, porque en mi consciencia religiosa siempre existirá el mal que me acecha; esto no quiere decir que culpe o suponga que la religión es la causa de mis males, sólo creo que condicionarnos detrás de la gran culpa es algo que nos ha esclavizado para manifestar nuestras experiencias con sufrimiento y apego.  

Siempre he creído en la existencia del alma, me gusta investigar sobre de ella, me gusta pensar que vive en mi y que mi cuerpo es su transporte; he sentido mucha curiosidad durante toda mi vida sobre lo que ella ha experimentado, vivido, sentido y creído a lo largo de sus vidas; sé que mi alma ha visto mundos, personas, colores y ha experimentado muchas situaciones y reconozco que no sólo lo ha hecho en esta vida a nombre de Shary sino en muchas otras más. 

La primera regresión a mi vida pasada fue cuando estaba convirtiéndome en coach; al principio sentía miedo, pero una parte de mí, sentía incredulidad de pensar que podía ver algo y que no sería mi mente la que me engañaría; sin embargo, a pesar de mis dudas previas lo hice y fue una de las experiencias más alocadas, increíbles y asombrosas que he vivido; mi propósito para tener una regresión era descubrir por qué tenía tanto miedo de desarrollar mis dones espirituales, resulta que en varias de mis vidas enfrenté la desconfianza de la gente y eso me hizo firmar un contrato de que cualquier conexión divina era inservible. 

Con esa experiencia fui testigo de una de las más divinas expresiones que puede tener el  alma y supe con certeza que no he pasado por este mundo sin sentido sino que siempre he tenido un gran objetivo y misión y que ahora me corresponde materializarla con amor, fe y disposición; a partir de ese momento, tuve la certeza de que quería conectar a los demás con su alma, consciencia y ayudarles a comprender sus traumas, creencias, contratos y bloqueos sobre lo que pasó en sus vidas pasadas y aunque su mente no recuerda, su alma vive diariamente aquello que le atormenta.

“El cuerpo no es más que un vehículo que utilizamos mientras estamos aquí, lo que perdura eternamente es el alma y espíritu.”

Brian Weiss.

Cuando empecé a ser yo quien guiaba las vidas pasadas de otras personas, un montón de dudas, sensaciones e inseguridades me bloqueaban, porque pensaba que jamás podría hacer ver algo a los demás y que se irían con la misma duda con la que llegaron; sin embargo, fui tomando consciencia de mi unidad, elegí creer y hacer las paces con mis dudas entonces comencé con mi primera regresión; se trataba de una mujer que quería saber por qué no podía sostener una relación estable con un hombre con quien había terminado y por azares del destino parecía que todo los separaba; ella vio que en varias de sus vidas se habían encontrado pero nunca estaban juntos, hasta que conectó con la vida más condicionante en donde se juró a sí misma que él era un hombre imposible, resulta que se vio como una esclava de raza negra y él, era un hombre blanco; a pesar de que ambos se enamoraron, sabían que lo suyo era imposible debido a la poca aceptación social que eso conllevaba; cuando ella supo eso y entendió la creencia que sostenía su conflicto amoroso, por fin pudo tener esa explicación que tanto había buscado y comprendió que nada los separaba sólo aquellas creencias que la mente eligió para privar al alma del amor.  

Otra gran y maravillosa regresión fue la de un hombre que tenía mucho miedo a la pobreza; él sólo se vio de niño, primero se observó con su madre actual y recordó las palabras que constantemente le escuchaba decir acerca de que nunca habría dinero suficiente; se vio en otro lugar pidiendo limosna, describía que veía carretas y caballos; pero al final, murió de hambre;  después se vio como un hombre de negocios que sólo le interesaba tener dinero, pero nunca le fue suficiente y murió careciendo desde su ambición; en términos generales, su alma estaba condicionada a experimentar la misma carencia debido a las creencias que imprimió como información y que le han hecho manifestar su miedo en diferentes cuerpos.

La experiencia de hacer regresiones es y ha sido uno de los servicios más hermosos y preciados que puedo ofrecer porque no sólo puedo conectar a los demás sino que yo también me conecto con ellos a través de su alma porque te das cuenta que su historia también es la tuya y en donde nuestros condicionamientos están tan arraigados que hemos preferido renunciar a la vida para vivir en la muerte; hemos elegido olvidar la abundancia para nadar en la escasez; hemos decidido evadir nuestros dones espirituales para cambiarlos por un fanatismo religioso; hemos preferido enterrar nuestra alquimia para cambiarla por brujería sin sentido; hemos elegido separarnos de la consciencia para ahogarnos en la inconsciencia; hemos optado rechazar el amor propio para ir en búsqueda del amor que no es; hemos decidido no creer en el amor de pareja que comparte desde la igualdad para quedarnos con aquellas personas que nos hacen creer que no somos iguales; nos hemos jurado muchas mentiras para nunca llegar a la verdad, aquella que nos dice que podemos, que somos, que tenemos; sin embargo, con los años, con las vidas, con el tiempo hemos decidido utilizar nuestro cuerpo como el ataúd de nuestra alma

Toma en cuenta que la vida es un gozo para el alma, no por nada decide regresar una y otra vez; sólo que su estado natural sabe que todo lo comprende y todo lo contiene; por consecuencia, necesita de experiencias duales para reconocer por qué decidió materializarse a través de un cuerpo; no son casualidad tus gustos, aptitudes, talentos y capacidades y si hasta hoy no lo has reconocido, no significa que no los tengas; posiblemente tu alma hizo un voto de castidad, traición o silencio que le impide reconocer quién es y saber cuál es el objetivo de su maravillosa existencia.  

Me veo en ti, Shary ChavLó