Todos los que estamos en la tierra venimos a experimentar las situaciones desde el amor y a conectar con las personas desde la empatía; sin embargo, a medida que vamos creciendo nos preparan para un mundo que deja la empatía de lado para ir en búsqueda de las personas que seguramente nos esconderán cualquier atributo relacionado al amor, pensando que eso es lo real.

¿Por qué nos alejan del verdadero amor? Todo comienza con la creencia de que Dios es un humano que sólo podemos encontrar afuera y su amor sólo es alcanzable siempre y cunado seamos “buenos”, esto significa que no importa si nos partimos a nosotros mismos en pedazos para mantener enteros a los demás, eso para el sistema de pensamiento imperante, significa ser buenos y bondadosos.

Como sabes, me encanta hablar del amor porque creo que es el único estado que tiene el poder de unirlo todo, desafortunadamente nos han hecho distorsionarlo y transformarlo en algo completamente disfuncional; por eso seguimos creyendo que el amor duele; pero cuando verdaderamente nos disponemos a conectar con él, atraemos a personas con esa misma consciencia que nos inspiran a seguir contribuyéndonos desde ese mismo lugar.

Hace un par de días un actor estadounidense se quitó la vida tirándose de un puente en Arizona; dentro de un comunicado confesó que no había sido un buen hombre por haber abusado de los demás y de sí mismo, ¿dónde crees que estaba el pensamiento original de esta persona para tomar la decisión de suicidarse? Estaba en la culpa sembrada que lo llevó a atentar contra su vida por el exceso de remordimiento con el que había sido programado a nivel familiar y colectivo; y al  no cumplir con la demanda de ser bueno, rechazó la posibilidad de ser malo y prefirió disociarse de la realidad antes de ser juzgado como el peor.  

“La vida comienza donde el miedo termina.”

Osho

Según la Organización Mundial de la Salud cerca de 800 mil personas se suicidan al año en varios países en el mundo; los pensamientos suicidas provienen del rechazo de estar en un lugar que nos obliga subliminalmente a ser como otros y nos impide conectar con nuestro auténtico yo, para correr detrás de un yo inalcanzable.

El suicidio es una disociación que experimentamos todos los seres humanos cuando nos sentimos profundamente separados de la divinidad, del amor, de la felicidad, de la paz y por supuesto, de uno mismo; esa separación está sustentada en las polaridades del bien y el mal que nos hace creer que si no somos buenos, no somos dignos de alcanzar el bienestar.

Recuerda que para los estatutos religiosos todos somos pecadores por haber nacido de forma impura; eso es una programación de culpa colectiva que nos ha hecho creer que estamos aquí para agradar a Dios y así,  ganarnos un espacio en el paraíso, razón por la cual, generamos un miedo inconsciente de la ira que tiene Dios sobre nuestras acciones y que seguramente nos impondrá un castigo llamado infierno mientras nos priva del paraíso; eso ha generado que la culpa se vuelva un estado omnipresente, omnipotente y omnisciente.

La existencia del cielo y el infierno proviene de los pensamientos que te alejan de la responsabilidad de lo que estás creando, el cielo y el infierno coexisten en el mismo espaciotiempo que es tu mente en relación con todo lo que experimentas, es por esto, que existen situaciones que clasificarás como un infierno y en otras te sentirás más en consciencia.

Nos han hecho creer que la culpa es algo natural y por eso la proyectamos en todas nuestras situaciones y por manipulación, hacemos que los otros se sientan culpables de nuestras causas y así, podamos tener control sobre sus estados emocionales.  ¿Por qué culpamos a otros? Una de las cosas que nos aterra a los seres humanos es sentir vergüenza porque nos conecta con la humillación y por ende, nos hace sentir poco amados y reconocidos, así que preferimos dejar que los otros asuman las cargas de nuestros errores para no tomar la responsabilidad sobre lo que nos corresponde.

Quiero decirte que lo peligroso de la culpa es que nos disocia de la empatía y por eso, seguimos creyendo que el malo es el asesino y al asesinado lo dejamos en el papel de la víctima, eso nos condiciona a creer que lo de afuera es lo que nos está haciendo sufrir; sin comprender que la víctima y el victimario decidieron encontrarse para manifestar sus propias culpas entre sí.

Debes saber que la culpa es tan sutil que buscará alternativas para castigarte y hacerte sentir como la peor de las personas, déjame decirte que no lo eres, sólo eres responsable de una parte de la causa porque así como tuviste poder para crearla, tienes el poder para cambiarla; debes tener presente que la culpa se vestirá de tu mejor amiga para convertirse en tu peor adicción y así, conseguir someter tu voluntad para dejarte atrás sin avanzar.

La vida es una de las pruebas más desafiantes a la que nos enfrentamos día a día, pero no significa que sea difícil, buena o mala; la vida es como tiene que ser y para entenderla necesitas vivirla sin condicionarte a ser buen@ porque lo que estás haciendo es alejarte de ti mism@ y eso te impide comprender que así como te lastiman, lastimas; así como te critican, critícas; así como te juzgan, juzgas y eso no te hace malo ni bueno; sólo te convierte en un ser humano que necesita despertar para saberse completo y aceptar que no necesita de otros para su propio reconocimiento.

Vuélvete libre, Shary ChavLó